El aprendizaje es un proceso, y en ese ciclo, a veces ocurren algunos accidentes. “Dolores de crecimiento” le dicen algunos. A algunos niños les gusta la música, y mi nieto, de tres años, es uno de ellos.
Aprender música es un proceso largo, pero … ese ciclo no debe interrumpirse, es más, debe incetivarse, y, como “la Práctica hace al Maestro”, para lograrlo es necesario que el niño tome contacto con el instrumento de su preferencia. Este es uno de esos casos, y … como es normal, esa experiencia conlleva algunos “accidentes”.


Los “accidentes” son una buena oportunidad de aprendizaje, para niños … y adultos !!! Allí apareció el abuelo, a ver si podía enmendar la situación. Comencé por el nicio. Primero fue necesario recordar dónde tenía algunas herramientas y luego ubicar en qué lugar del cerebro estaban los conocimientos básicos adquiridos hace muchos años en la Escuela Pedro Figari, de la ciudad de Montevideo, en el curso de “Violería” que se dicta en ese mencionado y EXCELENTÍSIMO centro de capacitación artesanal. Fue así como comenzó el siguiente proceso.




El instrumento volvió a estar en condiciones de producir
“música” POTENTE !!!!!!!
FUE UNA MUY BUENA OPORTUNIDAD PARA QUE TODOS APRENDIÉRAMOS ALGO !!!!!!!
Ver LUTHERIE INFANTIL (II) – 2da. reparación (por otro motivo).